A bordo del buque de instrucción marina «Capitán Williams», esta iniciativa, liderada por el investigador Iván Pérez Santos del Centro IMAR de la Universidad de Los Lagos, no solo permitió ampliar el conocimiento científico de esta región, sino que también integró la docencia y la extensión, ofreciendo una experiencia formativa única a bordo.
Pérez Santos destaca que, a diferencia de expediciones anteriores en embarcaciones más pequeñas, este buque permitió realizar más experimentos y extender los tiempos de muestreo, alcanzando lugares tan remotos como la Laguna San Rafael. «Navegamos alrededor de mil millas náuticas en 17 días, una hazaña que nos brindó una perspectiva inédita de la región», explica Pérez Santos.
Avances en la investigación marina
Uno de los focos de la expedición fue la recolección de imágenes hiperespectrales del océano, que revelan el «color» del agua, un indicador clave de la presencia de microalgas. Estas, si bien son fundamentales para la producción de oxígeno, incluyen especies que generan toxinas, responsables de las mareas rojas.
Este fenómeno representa una amenaza para el desarrollo económico sostenible de la Patagonia, especialmente para la acuicultura y la pesca artesanal. La nueva y extensa «librería» de imágenes obtenidas permitirá a los científicos entender mejor la dinámica de estos florecimientos algales y sus implicaciones.
Además, la expedición documentó el impacto del derretimiento glaciar en la Laguna San Rafael, un efecto directo del cambio climático. Las observaciones revelaron una «huella» superficial en el océano que hasta ahora era desconocida, abriendo nuevas líneas de investigación sobre cómo los glaciares moribundos afectan los ecosistemas marinos circundantes.
Los datos recolectados están siendo procesados en laboratorios nacionales e internacionales, con un invitado de Alemania analizando muestras en busca de nuevas toxinas.
Ciencia en acción
La expedición en el «Capitán Williams» priorizó la docencia a bordo y la interacción con las comunidades locales. Estudiantes de diversas universidades tuvieron la oportunidad de participar activamente, realizando clases prácticas y conferencias en pleno océano. «Cada navegación es un reto y un experimento social», comenta Pérez Santos.
El compromiso con la difusión del conocimiento se evidenció en las paradas en localidades como Puerto Cisne y Melinka. Allí, el equipo científico compartió resultados preliminares con estudiantes de liceos técnicos, alcaldes y mesas de medio ambiente.
En Puerto Cisne, los estudiantes pudieron observar microalgas directamente de las muestras, una experiencia que acerca la ciencia al territorio y fomenta vocaciones. «Nunca nos llevamos los resultados importantes para la casa, hoy en día los comunicamos rápido», enfatiza Pérez Santos.
Entrevista Completa: https://www.youtube.com/watch?v=YZrQrixuyQQ&t=1s





